La Posada del Inti anunció que cerrará una de sus sedes tras decidir finalizar su convenio con la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina (Sedronar), encargada de gestionar becas para usuarios sin recursos económicos para tratamientos de consumos problemáticos.
Según informó Fabián Messina, el titular de la Posada del Inti, alrededor de 45 pacientes dejarán de recibir tratamientos y hay 14 puestos de trabajo en peligro a raíz de esta medida. La atención en la institución, en caso de no revertirse el desfinanciamiento, comenzará a segmentarse mediante obras sociales y prepagas.
“En nuestro ADN está siempre trabajar con el Estado para ayudar a los que menos recursos económicos tienen. Migrar a las prepagas es un golpe para nosotros”, señaló Messina, en diálogo con LA CAPITAL.
Y profundizó: “Cerca de 45 usuarios tendrán que ser derivados, pero lo que más me preocupa es la lista de espera que había para ingresar y la constante demanda que tenemos. Hay entre 20 y 30 consultas presenciales en la semana, a eso se suman los mensajes por Whatsapp o mail. Es tremenda la cantidad”.
A través de un comunicado dado a conocer ayer, la Posada del Inti detalló que el convenio con la Sedronar fue finalizado tras 22 años. Y que a partir de la próxima semana se coordinará la derivación de los pacientes en tratamiento residencial con el equipo de auditoría de la Secretaría.
“Desde hace más de un año, la Posada del Inti ha expresado sus preocupaciones sobre el riesgo de pérdida de camas para los sectores más vulnerables en múltiples reuniones con autoridades y organismos de asistencia”, apuntó la institución.
Si bien hubo gestiones del titular de la Sedronar, Roberto Moro, para conseguir “aumentos progresivos” en los fondos, la entidad sostuvo que los ajustes económicos “han sido insuficientes”: esas subas “solo cubren el 50% del costo real del tratamiento mensual”, lo que ha llevado a la institución “a enfrentar deudas y dificultades irreversibles”.
“Como comunicamos en los primeros días de marzo, dicha Secretaría prometió un subsidio para evitar esta decisión. No obstante, ante la imposibilidad de que esto se concrete, seguir funcionando sería una inmensa irresponsabilidad, dado que no podríamos cubrir las necesidades básicas de los asistidos”, argumentó la organización que dirige Messina.
A pesar de la difícil situación, en el comunicado se ponderó el acompañamiento de la Subsecretaría de Consumos Problemáticos bonaerense. Y también del municipio, gracias al “aporte de dos profesionales” y a la disposición del área de Salud, que han “impactado en la reducción de costos”.
La Posada del Inti cuenta con tres sedes en Mar del Plata y aún no está definido cuál de ellas cerrará. En Caseros N° 4552 se brinda atención ambulatoria, mientras que los centros de Arrayanes Nº 6462 y de Calle 485 Nº 3232 son residenciales.
Fuente: lacapitalmdp.com