Una mujer de 66 años denunció en la policía que su hijo de 32 años había ido el domingo a pescar con amigos y ellos se habían vuelto y su hijo se había quedado incomunicado.
Ante esto, la policía inició una búsqueda y pudo dar con el pescador que se encontraba a unos 15 kilómetros de la localidad de Pirán.
El hombre estaba cansado, desorientado y deshidratado, y pudo reencontrarse con su familia.